Un tal Jules

¿Qué sería de mi biblioteca si no existiera Punto de lectura?

La mitad de mis libros son de esta editorial, y si aquí es accesible, no les quiero ni contar los precios de infarto (bueno) en tierras argentas.

Obviamente uno de mis libros comprados por aquellos lares TENÍA que ser de Cortázar. Porque sí. Y esta gente maravillosa parece que ha publicado todo lo que escribió este señor.

Así que adquirí una compilación de cuentos, que vino a unirse a sus hermanitos en mi biblioteca. Rayuela. Bestiario. Todos los fuegos el fuego. Entre otros.

Asumo públicamente mi malpegue con Jules Florencio. Porque sí.

Porque estudié humanidades.
Porque descubrí con Rayuela que uno se puede entrar a coñazos con un libro que al principio no termina de comprender, simplemente por obsesión.
Porque no me importa la gente que gusta de leer autores impronunciables simplemente para sonar más grandes, menos ¿trillados?.
Porque Julito se inventa palabras divertidísimas.
Porque cuando lo escuché hablar en youtube, me pareció que tiene las eses y las eres más lindas del mundo... y ahora siempre que lo leo, lo escucho hablar.

Con Oliveira lloré, putié, y me desmoroné los sesos mil veces.

Ahora con "Un tal Lucas" he llorado, pero de la risa.

Leanlo, por favor.

Miren esta maravilla:

"No se trata de escribir para los demás sino para uno mismo, pero uno mismo tiene que ser también los demás; tan elementary, my dear Watson, que hasta da desconfianza (...) le importa un bledo el destinatario puesto que lo tiene ahí a tiro, escribiendo lo que él lee y leyendo lo que él escribe, qué tanto joder".