Se me olvidaba... (o no)

Tambien quiero no extrañarte tanto.

Es tan pero TAN jodido.

En los pocos microsegundos que me deja libre este trabajo que está marchitándome la vida, sólo pienso en lo mucho que me gustaría ese café de casi todos los días.

Las carcajadas absurdas bailando en un carro con los vidrios abajo.

Las conversas pseudo intensas.

Las cochinadas compartidas.

Pero sobre todas las cosas, esa sensación de que alguien me espera siempre y la seguridad de saber que sólo hace falta una llamada para sentirnos acompañados.

¿Ahora con qué coño lleno este vacío en el pecho?

... lo peor es que no ha pasado ni un mes.

Y todavía no nos hemos despedido de verdad verdad